Nº 1.842 – 20 de Octubre de 2019

“Sean nuestros hijos como plantas crecidas en su juventud, nuestras hijas como esquinas labradas como las de un palacio; nuestros graneros llenos, provistos de toda suerte de grano; nuestros ganados, que se multipliquen a millares y decenas de millares en nuestros campos; nuestros bueyes estén fuertes para el trabajo: no Leer más…